El anuncio, realizado durante una conferencia en el Jardín de Rosas de la Casa Blanca, forma parte de una estrategia más amplia de tarifas recíprocas que busca fortalecer la economía estadounidense. Sin embargo, la inclusión de territorios deshabitados ha generado preguntas sobre la lógica detrás de estas medidas.
"Los pingüinos nos han estado estafando durante años", bromeó un exfuncionario de la administración Trump en redes sociales, mientras que líderes internacionales, como el primer ministro australiano Anthony Albanese, expresaron su desconcierto ante la decisión. "No está claro por qué un territorio sin actividad económica significativa fue incluido en esta lista", comentó Albanese.
Las islas Heard y McDonald, designadas como Patrimonio Mundial por la UNESCO, son conocidas por su biodiversidad y su aislamiento extremo. A pesar de no registrar exportaciones hacia Estados Unidos, su inclusión en la lista de aranceles subraya el alcance indiscriminado de las políticas comerciales de Trump.
Mientras tanto, las redes sociales se llenaron de memes y comentarios humorísticos, con imágenes de pingüinos "negociando" acuerdos comerciales. Sin embargo, los mercados financieros no encontraron nada gracioso en la situación, ya que las bolsas globales registraron caídas significativas tras el anuncio.
Nota de Medios 24/7